La Honestidad en el Mundo Inmobiliario

La Honestidad en el Mundo Inmobiliario

“La honestidad es el primer capítulo en el libro de la sabiduría.”

Thomas Jefferson

Siempre he pensado que la honestidad es una virtud esencial en el perfil de un
corredor inmobiliario, entiendo que esto aplica en todos los ámbitos y en la
esencia del ser humano, pero en este artículo quiero abordar la honestidad en el
corretaje inmobiliario. La honestidad comienza primero con nosotros, siendo
honestos con nosotros mismos conociendo nuestras fortalezas y debilidades,
para después serlo con nuestros semejantes, sean nuestros colegas o nuestros
clientes. La confianza es elemental y necesaria en una transacción inmobiliaria
donde el patrimonio y los ahorros de las personas están inmersos, nadie va a
colocar su patrimonio en manos de una persona en la cual no tenga confianza, y
para que exista la confianza debe existir la Honestidad.

La honestidad es una virtud que es innegociable, irreemplazable, y de una alta
importancia, la honestidad sienta las bases para la confianza, y no sólo se trata de
ser honesto en las cosas que son positivas, sino también en las que
aparentemente no lo son, me explico, el ser honestos con nuestros clientes es
decirle que su inmueble está fuera del precio de mercado, como también
asesorarlo cuando está por debajo del mismo. La honestidad va juntamente con la
empatía, como dice el dicho: Trata a los demás cómo quieres que te traten a ti. Al
ser honesto con nuestros clientes abrimos una puerta la cual es muy difícil que
pueda ser cerrada, la honestidad te permite tener la frente en alto, caminar erguido
y saber de qué has cumplido con tu deber como Corredor Inmobiliario, la
honestidad es un valor que no puede ser comprado, debe ser aprendido, y
ejercitado.

La honestidad es puesta a prueba en cada día en el ejercicio de nuestra profesión,
de allí la importancia del ejercicio de la misma. Con el pasar del tiempo he
aprendido que algo muy importante en el mundo inmobiliario es el nombre, el
cómo se refieren los clientes y colegas de ti como corredor inmobiliario, bien lo dijo
Salomón en sus proverbios: “… Mejor es la buena fama que la plata y el oro”
Proverbios 22:1, y la mejor manera de tener buena fama es siempre actuar con
honestidad con verdad y sinceridad. Es muy probable que en el progreso de la
venta, y en nuestro deseo de que todo llegué a feliz término, podamos en
determinado momento usar los recursos de persuasión, exagerar una virtud u
omitir algún detalle que no consideremos tan relevante o necesario, y esto es
parte también de la venta, sin embargo siempre debe primar la honestidad como
valor fundamental en la transacción.

Ser honestos con nosotros mismos es entender nuestras limitaciones, pero
también nuestras virtudes, saber qué debemos mejorar, en qué debemos
capacitarnos, en qué momento estamos avanzando, y en cuál nos detenido.

La honestidad comienza internamente para después hacerse visible en el mundo
externo, primero seremos honestos con nosotros y después con nuestro prójimo,
esta vida es una constante siembra, por eso sembrar la semilla de honestidad nos
llevará al fruto anhelado del éxito, cómo dijo el dramaturgo inglés, William
Shakespeare:  

“La honestidad es la mejor forma de actuar. Si pierdo mi honor, me
pierdo a mí mismo.”

Ennis J. Martinez L.

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